El caso es que "sólo sé que no sé nada" no tenía porqué dejar de ser verdad.
Con un par de ojeadas pretender crear teorías es propio de idiotas. Ser reincidente no tiene nombre.
Me viene a la memoria una amiga de Ana que pasó dos semanas en Malabo y no paraba de dar charlas sobre como era África.
Pues casi lo mismo.
Y la edad atempera la estupidez, pero curarla, curarla...no sé.
Aunque eso de que la edad atempera es discutible. Más bien acentúa.
Che. Estas cosas me dejan tocado. Tengo un ego de mondondanga.
08 junio 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario